Imprimir esta página

Viaje a la Hispaniola (I): ideología de género para legisladores

Jueves, 14 de Diciembre de 2017
Regreso de Argentina. Exhausto, pero más que satisfecho. No me espera ningún descanso. A decir verdad, apenas tengo tiempo de echar la ropa sucia en la lavadora para, una vez limpia y seca, volverla a meter en la maleta de mano y salir para Santo Domingo.

Sí, apenas tengo unas horas en casa y ya parto hacia el aeropuerto camino de la República Dominicana. Es una de las naciones de mi amada Hispanoamérica donde no he estado con anterioridad. Es un aliciente más de un viaje que promete.

A día de hoy, algunos siguen repitiendo el error de afirmar que cuando la flotilla española al mando de Colón llegó a la isla le puso por nombre la Española. No fue así. La denominó la Hispaniola, es decir, la Pequeña España. Lo que el audaz navegante y los sufridos marinos del Reino de Castilla encontraron no fue una posesión que sumar a las de España sino un lugar que vieron como si fuera una España en pequeño. Lo entiendo, pero de ello hablaré más adelante.

Teóricamente, tendría que haber llegado sólo para intervenir en el Congreso de EDUCA a instancias de la gente de Acción cristiana. Sin embargo, todo ha ido creciendo de manera natural y, al fin y a la postre, voy a quedarme una semana entera. En lugar de llegar el viernes 24, aterrizo el martes 21. El vuelo es breve y agradable, una clara confirmación de que el sur de la Florida es un lugar estratégico en el que vivir si se desea alcanzar Hispanoamérica.

Este primer día, va a ser de agradable adaptación. El alojamiento es excelente – tranquilo, cómodo, con buena conexión a internet … - y toda la actividad se limita a una conferencia semi-familiar en el curso de una cena. Es ésta una forma de exposición bastante extraña en España, pero que resulta muy común en el continente americano. Exige saber dosificar contenidos porque no es lo mismo tener delante una audiencia de estudiantes o de académicos que a una formada por comensales. No resulta gran problema si se domina el tema aunque imagino que tiene que resultar muy incómodo si no se da esa circunstancia. Para mi, desde luego, resultar una ocasión muy grata a pesar de algunos problemas con el equipo de sonido. El día siguiente sí presenta un desafío mayor.

Se trata de dar una conferencia sobre el significado de la ideología de género en el curso de un desayuno con senadores y diputados. La respuesta a la convocatoria va a ser todo un éxito que superará las expectativas más optimistas de los organizadores. No es para menos porque más de medio centenar de legisladores – un par de días después me dirán que más de ochenta - acude a la cita. Por añadidura, también están presentes el presidente del senado, una ministra acentuadamente feminista y un obispo católico que se ha caracterizado por su apoyo a la causa pro-vida. Durante algo más de una hora, voy desarrollando en mi exposición lo que es la ideología de género, la manera en que se difunde, su repercusión en la legislación y las metas que pretende alcanzar. Mi planteamiento no es ni confesional ni teológico sino jurídico y si se quiere filosófico. Está abierto a cualquier persona que conserve el sentido común y que, por encima de todo, desee el bien de su nación.

En alguna ocasión, la exposición es interrumpida por aplausos. Sucederá lo mismo al concluir. Con todo, lo más interesante, a mi juicio, son las preguntas que vienen después de la exposición. Es obvio que no pocos de los legisladores conocen, siquiera en parte, el peligro que puede implicar para su nación la entrada de la ideología de género. Se percatan – aunque no dominen el tema o carezcan de argumentos – de que es un verdadero veneno que perjudicará a la familia y con ella al desarrollo saludable de la sociedad.

De manera bien significativa, todas las legisladoras que piden la palabra apoyan mis puntos de vista en un rotundo mentís a las pretensiones de las feministas de género de que sólo ellas representan a la mujer.

Por si fuera poco, la República Dominicana no tiene un problema de crecimiento demográfico exagerado. A decir verdad, está justo en el punto en que puede revertir el descenso y lograr el recambio generacional. La promulgación de leyes contrarias a la familia y pro-abortistas significaría no sólo un grave peligro sino también una lamentable debilidad frente a la entrada masiva y descontrolada de inmigrantes de Haití. Ignoro si lo sospechan, pero la ideología de género, entre otras consecuencias, tendría la de debilitar su cohesión nacional, erosionar su capacidad de crecimiento y facilitar su anegación por los haitianos. Me pregunto si no será una suerte que los dominicanos puedan ver ahora con claridad lo que es mucho más difícil de comprender en Europa.

Salgo muy satisfecho de la conferencia aunque sólo será en los días siguientes cuando me iré percatando del impacto que ha causado la conferencia. En los medios se dispara la controversia desde ese mismo día. Miembros de la administración que, teóricamente, iban a debatir conmigo en distintos medios deciden excusarse y no comparecer. No me parece mal. Por el contrario, creo que es una clara señal de hasta qué punto la ideología de género sólo se mantiene sobre la base de amordazar a los que son contrarios a ella. A decir verdad, estoy más que convencido de que basta con utilizar el sentido común más elemental para percatarse de lo aberrante y dañina que es la ideología de género para cualquier sociedad.

En los días siguientes, distintos legisladores enviarán cartas a los organizadores del acto agradeciéndoles su labor e incluso mencionándome expresamente. Sin duda, se trata de gente preocupada por el bien común.

El día – en todos los sentidos – acaba de empezar. Delante tengo una larga entrevista en el Diario libre a la que seguirá una grabación para el programa de TV Entendiendo los tiempos sobre El peligro del Islam – el programa ha desaparecido de youtube y no puedo darles cuentas del por qué – y, especialmente, una conferencia sobre La ideología de género en el Auditorio IBJS. En el programa de TV me llevo la alegría de conocer, junto a Eduardo Saladin y Salvador Gómez Dickson, al pastor Sugel Michelén. De origen palestino, Michelén es muy buen amigo del pastor Boni Lozano que pastoreaba la iglesia en la que yo me congregaba cuando aún vivía en España. La impresión que me causan todos ellos es excelente. Se trata de gente que busca asentarse en su enseñanza y en su vida en la Biblia lo que resulta verdaderamente refrescante.

La conferencia de la noche va a ser mucho más amplia que la de la mañana ante los legisladores. Esa circunstancia me permite, por ejemplo, referirme a los intentos de la ideología de género de introducirse en el seno del cristianismo mediante instrumentos como la denominada Queer Theology. Me detengo así en el libro El Evangelio subversivo de Thomas Hanks que, en español, ha publicado la editorial CLIE y que constituye una de las muestras más claras en nuestro idioma de esa infiltración. Entre otros disparates, el teólogo Hanks no tiene inconveniente en señalar que el criado del centurión al que curó Jesús fue, en realidad, el amante del oficial romano y que, por tanto, Jesús bendijo las relaciones homosexuales o en afirmar que el discípulo amado – previsiblemente Juan – era el amante de Jesús. Como el Nuevo Testamento condena de manera clara y explícita la conducta homosexual, Hanks se permite interpretaciones creativas de esos pasajes de la Escritura. Así, la condena de las prácticas homosexuales contenida en Romanos 1, Hanks la explica diciendo que se refiere a relaciones anales y sin preservativo entre varones. No todas las relaciones homosexuales son, ciertamente, anales, pero cuesta trabajo creer que en la Roma del siglo I el uso del condón estuviera muy extendido. En el colmo del dislate, al comentar el pasaje de Apocalipsis en que se dice que se contemplaba el arco iris, el tal Hanks señala que es una imagen digna del desfile del día del orgullo gay. Se trata sólo de algunos ejemplos referidos a un libro que sólo puedo calificar de inmundo y blasfemo.

 

Más allá del mal gusto, este comentario del Nuevo Testamento no tiene el menor reparo en adentrarse en la abominación con tal de defender la ideología de género y contaminar con ella el cristianismo. Este aspecto no es – ni con mucho – el más importante de la exposición, pero a youtube pasará en videos separados que tendrán una repercusión internacional. Al concluir la jornada, me digo que no ha sido, en absoluto, baldía.

Les incluyo a continuación los videos de las conferencias sobre el islam y sobre la ideología de género. Espero que les sean de utilidad. God bless ya!!! ¡¡¡Que Dios los bendiga!!!

CONTINUARÁ

 

Aquí está el video sobre el islam

www.youtube.com/watch?v=Rmz21ylUBSw

Y aquí la conferencia La ideología de género y su agenda deconstructiva

 

www.youtube.com/watch?v=GQlQOH_ZX04